El año no se acabó

Nacional aún pelea por el Campeonato Uruguayo.

Perder el clásico fue un duro golpe para Nacional, pero el año no se acabó. Nacional aun pelea por la tabla anual.

Cuando se disputó la final del torneo Intermedio, hace dos meses, Nacional estaba en una situación excelente de cara a lo que quedaba del año. Había todo un torneo corto por delante, pero el decano del fútbol uruguayo era líder de la tabla anual con 54 puntos, contra 53 de Defensor y 44 de Peñarol. Dos meses después, y luego de perder el clásico, Nacional se ve ocho puntos atrás en la tabla del torneo Clausura y cinco en la tabla anual. Muy rápidamente se desperdició la ventaja obtenida en la primera mitad del año – son ya ocho puntos perdidos en las primeras cinco fechas, cuando en las demás 22 de los torneos Apertura e Intermedio Nacional perdió apenas 12.

Evidentemente que el cuadro es difícil, pero no imposible. En el torneo Apertura 2011, al final de siete fechas, Nacional se vio con diez puntos conquistados y once perdidos – estaba casi fuera de combate. Pero el equipo dirigido por Marcelo Gallardo se recompuso de manera heroica con una secuencia de victorias (y un empate) y finalmente llegó a la punta en la fecha 14 y obteniendo el título con un triunfo sobre Liverpool en la última fecha.

En aquella ocasión, algunos de los principales oponentes (como Danubio y Defensor) fueron enfrentados en las primeras fechas, quedando apenas Peñarol para más tarde. En el presente torneo Clausura pasa algo parecido: Nacional ya enfrentó a Danubio y Peñarol, quedando Defensor para la penúltima fecha.

El próximo rival es Racing, quien hará de local en Rivera, y al menos en teoría, es un partido que Nacional tiene todo para ganar. Nacional jugó allí en el Apertura contra El Tanque Sisley – precisamente el rival de la fecha 7 – y venció. Y si bien la posición de El Tanque no es de las peores, va bastante abajo en la tabla. Después viene la visita a Liverpool. Belvedere no es una cancha fácil, pero Liverpool también no hace una campaña brillante. Tres partidos seguidos contra los equipos que están en posiciones 11, 12 y 13 en la tabla anual. Conquistar los 9 puntos es fundamental para mantener a Nacional vivo en el torneo y necesariamente hará que Nacional se acerque a al menos uno de los rivales directos – eso porque Peñarol recibe a Defensor en la fecha 8.

Las fechas 9 a 11, en cambio, son partidos contra rivales que ocupan las posiciones 4 a 7 en la tabla anual. Nacional recibe a Boston River y después visita a Wanderers – en cuya cancha ofició de local dos veces, con una victoria y un empate, cuando el primer estadio mundialista estaba suspendido durante el torneo Apertura. Finalmente, en la fecha 11, Nacional va de local contra Cerro.

Además de Cerro, Fénix también llevó Nacional al estadio Luis Tróccoli durante el torneo Apertura y salió derrotado. En seguida, Nacional visitará a otro equipo que realiza una buena campaña: Rampla Juniors, quinto colocado en la tabla anual. El partido posiblemente se juegue en el estadio Centenario. Además, la última victoria de Rampla sobre Nacional ocurrió en 2011, en el Gran Parque Central.

Para la penúltima fecha, Nacional recibirá a Defensor. Este equipo ha sido la piedra en el zapato de Martín Lasarte: fueron dos derrotas por 3 a 2 y una victoria por 1 a 0. La victoria representó el título del torneo Intermedio; y sobre las derrotas, hay que recordar que en el Apertura Nacional fue víctima de un error de Daniel Fedorczuk, quien cobró penal para Defensor en una jugada en la que la pelota tocó primero en el brazo del jugador de Defensor y después en el zaguero tricolor. Si Nacional llega con chances, esta puede ser la fecha decisiva contra un rival directo. Y dependiendo de la posición de Peñarol, puede hacer recordar lo sucedido en 1997.

Finalmente, en la fecha 15, Nacional será visitante ante Sud América. Es imposible prever en qué estadio, porque si el cuadro tricolor llega con posibilidades, habrá rivales que darán todo para que Nacional juegue en cualquier otro lugar que no el estadio Centenario. Además, la campaña de Sud América es la peor de todas hasta ahora (las otras dos instituciones que integran el “botton 3” en la tabla anual son Plaza y Juventud, contra quienes Nacional ya jugó y venció en el torneo Clausura).

Peñarol y Defensor son los rivales. El cuadro aurinegro tendrá la siguiente secuencia: Fénix (L), Rampla (V), Defensor (L), Sud América (V), Juventud (L), Danubio (V), Plaza (L), River Plate (V), Cerro (V) y Racing (L). Excepto contra Defensor, no es algo muy realista esperar que Peñarol pierda puntos de local, especialmente por la forma como arrancó el torneo; sin embargo, tiene rivales difíciles para visitar. Los puntos del clásico tienden a ser decisivos en una eventual disputa.

Defensor, si conquista el Clausura, será automáticamente campeón uruguayo – aun si Nacional queda adelante en la tabla anual. Esto porque fue el ganador del Apertura, y el reglamento establece que el ganador de los dos torneos es campeón, aunque haya perdido el liderazgo de la tabla anual durante el torneo Intermedio. Sus rivales a continuación serán: Plaza (V), River Plate (L), Peñarol (V), Racing (L), El Tanque (V), Liverpool (L), Boston River (V), Wanderers (L), Nacional (V) y Fénix (L).

Solucionar este campeonato no es fácil – pero se puede decir que no es tan difícil como aquel mal iniciado Apertura 2011, que finalmente tuvo a Nacional como campeón, tanto del torneo corto como también de la Copa Uruguaya. Nacional puede recuperarse. Hay año para rato.

Manoel Castanho