Por decano.com
22 Nov 2017
Clausura2017

El fútbol uruguayo, muestra una vez más, la peor cara.

El fútbol uruguayo, muestra una vez más, la peor cara. La que deja expuesto al sistema y al poder que domina nuestro futbol, midiendo con distinta vara situaciones iguales.

La mesa ejecutiva desoyó un informe de seguridad, para favorecer los intereses de los equipos de los integrantes. Fundamentalmente Defensor y Peñarol, que disputan la tabla anual con Nacional

La mesa detuvo el comienzo del campeonato por seguridad, le impidió a Racing ser local en el Roberto por seguridad, pero fijó el Olímpico a pesar de un informe contrario. Esto sumado a la fijación del Viera en paralelo a la rural, condición que históricamente era negada.

¿Un tema de justicia deportiva?

No se trata de justicia, porque no juega nuestro tradicional rival en ese estadio.

Hace un mes Rampla Jr. (igual de comprometido en el campeonato y Peñarol en una situación similar a la que hoy tiene Nacional en la tabla) eligió el Viera para enfrentar a su rival y luego aceptó ir al Estadio por una promesa de dinero, que no cobró porque arregló de palabra.

Sería bueno saber: ¿Por qué Rampla jugó durante años de local y de visitante ante CAP en el Estadio? Y ahora que CAP tiene por fin su propia cancha, ¿Por qué sigue aceptando jugar en el Estadio?.

La justicia estrictamente consolidada es que todos jueguen en los mismos escenarios, y que los mismos estén en condiciones de recibir a todos.

No se trata tampoco de la “fiesta en el barrio”, por la misma razón, salvo que esperen que Nacional aporte la fiesta.

La actitud poco fraternal de Rampla contra Nacional agrega además un elemento definitivo: Nacional le cobró a los hinchas picapiedras $250 la entrada y le entregó un beneficio extra a los socios, cobrándoles $170.

Al momento de poner precios Rampla a nuestros hinchas, lejos de tener una actitud de reciprocidad, coloca las entradas a $400. 

Si se buscara igualdad, que tiene un sentido distinto a la justicia, la misma debería aplicarse para todos los casos, el mismo criterio.

Es decir, las mismas requisitorias que las autoridades le realizan a Nacional para su estadio, debería pedirla al resto de los equipos.

Los mismos gastos en seguridad, los mismos controles, todo.

Es más que conocido que el Ministerio del Interior le exigió a Nacional la compra de cámaras de reconocimiento facial para instalar en el Gran Parque Central. ¿Le pidió lo mismo a Rampla, a Danubio, a Defensor, a Cerro…?

Le pidió a Nacional además de cabinas para uso del Ministerio, la instalación de columnas en el propio césped donde montar más cámaras y todo a cargo de las arcas de los socios de Nacional. ¿Le pide a Rentistas, a Racing, a Liverpool, algo así?

Claramente en Uruguay no es lo mismo Nacional que cualquier otro equipo. Es la institución más grande del país y dueña de una historia incomparable.

¿Por esto merece beneficios? No, pero si absoluto respeto.

Nacional va a ir al Olímpico como fue otras 3 veces este año al Cerro, a enfrentar al local en el Troccoli y a Fénix. Como fue a Jardines 3 veces, el Viera 3 veces, Atilio Paiva 2, al Franzini, Supicci, el Saroldi, Belvedere, al Campus...a todos lados.

Nacional es la hinchada record en concurrencia al exterior, nos gusta ir, no hay límites. Nuestra gente va sin problemas y contenta a cualquier parte.

Este año Lanus tuvo que ampliar el lugar otorgado a “la primera hinchada” en el partido de ida por la copa. Botafogo vió como la gente tricolor triplicó la que llegó a Montevideo del “fogao”, en otros años Boca, River, Rosario y podemos seguir…

De todas maneras, la Mesa Ejecutiva jugó una carta fuerte.

Fue en contra de un informe de la seguridad, como no hizo en el comienzo del campeonato con el clásico o en el partido que Racing, quería fijar en el Roberto para enfrentar a Peñarol.

La mesa jugó deportivamente, no políticamente.

Y los laderos del poder, apoyaron de manera militante, desde los micrófonos.

Juan Vallarino




SEGUINOS

Crear una cuenta



Ingrese a su cuenta